Propósitos para 2011

Otro año más, y otro año cargado de buenos propósitos:

• No enfadarme con los niños porque no recogen el cuarto o se llevan todo el día viendo Bobo Bob Esponja o Dora Exploradora, porque, al fin y al cabo, es señal que los niños están en casa y quieren estar en mi casa.
  
• No molestarme por el desorden y la mierda que hay que limpiar tras una cena o un jaleo en casa, porque, al fin y al cabo, es señal de que mis amigos han estado en mi casa.
  
• No enfadarme porque cada día me esté más pequeña la ropa, porque, al fin y al cabo, es señal que tengo para comer y no estoy en el paro.
• No hacer ascos a las labores de casa, porque, al fin y al cabo, es señal que tengo casa y puedo pagarla mes a mes.
• No quejarme del que se lleva todo el día criticando al gobierno o al alcalde, porque, al fin y al cabo, es señal de que tenemos libertad de expresión.
• No despotricar porque no ecuentre aparcamiento, porque, al fin y al cabo, voy conduciendo y tengo coche, aunque esté antigüito el pobre.
• No volverme loco con los ruídos de la calle, de los bares, de la tele tan alta, porque, al fin y al cabo, es señal de que oigo y no tengo problemas auditivos.
• No resoplar por el cansancio al llegar del trabajo, porque, al fin y al cabo, tengo trabajo y no estoy como muchos millones de españoles.
• No pegarle una patada al despertador cada mañana, porque, al fin y al cabo, es señal de que estoy vivo.
• No borrar gente de mi lista de contactos porque me manden correos reenviados, porque, al fin y al cabo, es señal que tengo amigos que piensan en mi.

De nuevo, feliz 2011.